La etapa de hoy fue de 23 kms. La niebla fue aumentando a medida que avanzábamos. Casi todo el tiempo caminamos por senderos entre bosques. Un sube y baja como los últimos días pero no muy empinados. A la hora mas o menos empezó a caer una llovizna muy fina que terminó por empaparnos. Una fuerte bajada por un camino empedrado nos condujo hasta la entrada de Cee.
Habíamos esperado ver el mar por primera vez desde que salimos de Alicante y también el Cabo de Finisterra en la lejanía desde la cima de la montaña pero la niebla espesa no lo permitió. Lástima! Nos acordábamos de la hermosa vista que tuvimos hace cinco años pero... no pudo ser. Así es el Camino, nunca igual...
Dos kms después de Cee, caminando por al lado de la playa, llegamos a Corcubión, nuestra última parada antes de Finisterra. Allí recién paró la llovizna.
Tanto Cee como Corcubión fueron habitados por los celtas y sus habitantes se dedicaron por siglos a la pesca de ballenas y cachalotes. En la ensenada de Caneliñas hubo una factoría ballenera desde 1924 que se mantuvo activa hasta 1995, siendo la última en España en cerrar sus puertas.
Mañana llegaremos al cabo de Finisterra, nuestro destino final! Parece mentira que ya estemos tan cerca...
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